Finish Line comenzó con un enfoque en la producción de lotes pequeños, el desarrollo del producto y el control de calidad. Construir una identidad de marca y extender el área de cuidado de bicicletas se convirtió pronto en una prioridad. En 1990 Finish Line reconoció que existía un potencial internacional para vender sus lubricantes de bicicleta y la compañía comenzó a exportar Alemania e Inglaterra. Pronto la compañía comenzó a asistir a demostraciones de bicicletas en Europa y Asia y estos esfuerzos ayudaron a propiciar una expansión global adicional. En años reciente, Finish Line se ha concentrado en enseñar a los ciclistas cómo escoger y utilizar los lubricantes, limpiadores y herramientas de limpieza Finish Line que se ajusten mejor a sus bicicletas, a las condiciones en las que las montan y a su compromiso personal con el mantenimiento de las mismas.
Puedes usarlo mojado o seco y las cerdas son reemplazables
Fabricado con cerdas rígidas
Una pieza incluida
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